lunes, 18 de abril de 2016

Capítulo 9: Problemas y más problemas.



La relación del príncipe raro y el ladrón ya no tan peligroso va viento en popa que en el idioma de los marineros significa que va de maravilla ¿Qué bueno verdad? Pues por ese lado que bien, pero ustedes saben que en toda historia no todo es color de rosa, es hora de que pongamos pies en la tierra y recordemos lo problemática que es la vida…


—¿Qué ha ocurrido con la búsqueda del príncipe?—Interrogó el rey Light molesto. En el castillo de Nostrade, en una sala especial con mesa redonda estaban los cuatro reyes con un ambiente tenso.


—Mi mejor caballería está buscando es cuestión de que lo encuentren-Hablo con expresión seria Ging.




—Entonces cuando lo encuentren es necesario organizar una nueva competencia por el sucesor del ojo del águila, debido a lo que ocurrió en la primera—Explico tranquilamente Paol alterando al rey de marionetista.


—Absolutamente no, antes de la intervención mi luchador había derrotado a los otros contrincantes limpiamente por eso me niego a la repetición de una nueva competencia—Dijo Omokage mirando en forma de advertencia a los otros reyes.


—Estoy de acuerdo con usted, en cuanto traigan de regreso a mi hijo se casara inmediatamente con la princesa Retz de eso no hay duda—Aclaro Ging, ante eso Paol chasqueo la lengua frustrado.


— Me alegro de que asegure eso rey Ging pero todo esto ocurrió debido a la altanería de su sucesor y su torpeza—Hablo nuevamente Omokage mirando serio al nombrado.


—Mis informantes me han dicho que hizo un trato con su hijo, si el atrapa al líder de los ladrones que nos amenazaban no tendría que contraer matrimonio sin embargo termino siendo secuestrado y ahora el ladrón lo amenaza a usted ¿Es eso cierto?—Agrego de manera acusadora Light a Ging pero este ni se inmuto.


—Si es así.


—¡¿Cómo se atreve?! ¡Esto es ignorar el tratado de paz que pactamos!—Alzo la voz Paol molesto pero Ging alzo la mano en señal de que guardara silencio, los tres reyes al mirarlo mejor tenía una venita en su frente y una expresión irritada.


—He obedecido el pacto de paz al pie de la letra al a ver hecho ese trato con mi hijo Gon, si el perdía se casaría, pero si ganaba nos desharíamos permanentemente de una amenaza para los reinos, de una o de otra manera ustedes saldrían ganando ¿Acaso tienen algún inconveniente con esto?—Los presentes guardaron silencio—traerán de vuelta a Gon y entonces estos enfrentamientos terminaran, les pido que tengan paciencia hasta entonces señores—finalizo de manera respetuosa.


Los reyes estaban tensos e impacientes ¿Por qué? Simple, tenían muchas cosas acumuladas, primero la tremenda actuación que hizo el príncipe raro al rechazar el compromiso que tenía, luego el trato que hizo con el rey, y ahora fue secuestrado por una peligrosa banda de ladrones sin dar señales de vida, por suerte el rey de Ballena era bueno con las palabras y lograba persuadirlos pero ¿Por cuánto tiempo durara? Él contaba con que su hijo regresaría y se casaría voluntariamente y sin objeciones, ¿Qué problemático no creen? Ya esto es mucho y apenas comenzamos...


—Kurapika informe de avances—Pidió Kaito. A unos cuantos kilómetros del reino Nostrade en unas colinas estaba montado un campamento de la caballería de Ballena, estaban tomando una pausa para descansar y analizar la información recogida.


—En un pequeño pueblo a la orilla de una montaña nevada se ha visto un joven con las características del príncipe—Declaro de forma lógica Kurapica.


—Sin embargo son solo rumores yo no me fiaría—Aporto el doctor Leorio.


—¡Rumor o lo que sea es lo mejor que tenemos!—Lo presentes miraron entre nerviosos y asustados como se aproximaba una mujer con armadura roja.


—D-De veras que no es necesario que nos acompañe señora Mito—Hablo de la manera más humilde y respetuosa que podía Kaito, sin embargo la mujer lo miro molesta.


—Ya dije que no, eh traído refuerzos del reino y tu mejor que nadie conoces mis habilidades—Saco una espada de manera desafiante asustando a los otros—traeré de vuelta a mi niño y si ese delincuente le hizo algo le cortare el moño de abajo.


—¡S-Señora Mito esa no es manera de hablar!—La peli naranja lo ignoro y se fue, el peli largo preocupado de que haga alguna imprudencia la siguió dejando al rubio y al moreno nerviosos con una gotita de sudor estilo anime resbalándose por su frente.


—Va-Valla pensar que semejante leona vivía en el interior de una madre tan dulce—Dijo Leorio impresionado de ver la determinación de la mujer, Kurapika asintió estando de acuerdo.


—Su percepción y habilidades de batalla son de profesional sin decir que trajo al mejor equipo de rastreo del reino, ya es cuestión de tiempo para que encontremos a Gon—Pronuncio con seguridad.


¿Ahora lo ven? Las personas más queridas por el príncipe lo están buscando con el mejor equipo. Por supuesto ellos creen que está en peligro, amenazado de muerte, siendo torturado las veinticuatro horas del día no tienen ni idea de lo que realmente está pasando, ¿Y qué pasaría si se enteran? De la extraña relación entre esos dos extraños jóvenes ¿Cómo reaccionaran? Que problemático ¿Cómo se solucionara esto?


—¿Oyó eso jefe?—Cerca del campamento, escondidos en unos matorrales estaban Kuroro junto con Nobunaga y la chica peli rosada Machi.


—Lo oí perfectamente Nobunaga—Sonrió con malicia.


—Se dé que pueblo hablan, podemos investigar y buscar más detalles—Dijo tranquilamente Machi.


—Yo lo hare, me vengare del engaño que me hicieron con ese estúpido perro—Pronuncio entre dientes molesto.


—Está bien, recuerden no subestimen a ese grupito son bastantes astutos, sean cautelosos que no se repita el mismo error.


—Si—Dijeron al mismo tiempo Nobunaga y Machi.


—Pueden matar si tanta sed de sangre tienen pero eso si—Miraron a su líder que hablaba en forma de advertencia—me traen con vida al príncipe y a Killua, de esos dos yo me ocupo—ordeno a lo que los otros asintieron.


Valla ¿Creyeron que eso era todo? Pues no, hay problemas por doquier que no se resolverán fácilmente, ¿Qué planea este hombre con el príncipe? Nada bueno eso se los aseguro ¿Qué tiene contra el ladrón ya no tan peligroso? No es nada personal es solo que le estorba en sus planes, ¡Oh! Por cierto ¿Que Estarán haciendo Gon y Killua?


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—¿Eso es todo?—Pregunto Killua interesado, frente a él se hallaban Lyon e Hisoka.


—Pues por ahora sí—Respondió Lyon encogiéndose de hombros.


—Si no hacemos algo pronto las cosas se nos van a complicar, puede que quedemos con las manos vacías y perdamos algo mas ¿No es maravilloso?—Decía risueño el payaso, estaban en la mansión escondite de los ladrones, en la sala, los subordinados estaban de pie y acababan de informarle la situación a su líder que estaba sentado en un sofá rojo con las piernas cruzadas con una cara pensativa.


—El payaso pervertido tiene razón, a este paso la situación podría salírsenos de las manos ¿Qué haremos jefe?—Pregunto tranquilamente peli naranja interesado en la respuesta.


—Seremos más cuidadosos, por suerte no saben nuestras identidades pero si saben la del príncipe así que sobornen o amenacen a todo aquel que pueda aportar ayuda a la caballería o al Geney Ryodan, incluso esparzan información falsa que diga que fue visto en otro lugar lejos de aquí, así perderán nuestro rastro—Ordeno serio, los mayores asintieron de acuerdo.


—En ese caso llamare a Tompa, seguramente acudan a él—Propuso con una sonrisa Hisoka.


—Hazlo—El peli naranja se dio cuenta de algo que lo intereso.


—Por cierto rebelde ¿Dónde está el principito? No lo eh visto desde el desayuno.


—Fue con Alluka al mercado—Respondió con expresión aburrida—esto por aquí es muy tranquilo sin él.


—¿Está bien que ande por ahí sin que nadie lo vigile?


—Sabe cuidarse solo.


—No me refiero a eso sino por-


—No volverá escaparse—Sonrió astutamente al leer los pensamientos del mayor—Gon ya no es nuestro prisionero se quedara con nosotros por lo que ya no hay necesidad de vigilarlo todo el tiempo.


—Fufu probablemente tengamos que protegerlo para evitar que se lo lleven—Hisoka soltó una risilla divertida con tan solo imaginárselo.


—Así será, se arrepentirán de volverse nuestros enemigos—Decía sonriente con una mirada asesina ante eso Lyon arqueo una ceja intrigado.


—Entiendo que trate así al Geney ryodan pero ¿Los de la caballería no son amigos del príncipe? —Pregunto curioso Lyon a lo que Killua lo miro serio.


—Ellos quieren que Gon regrese solo para obligarlo a casarse, yo obviamente no quiero eso y él tampoco quiere, lo evitare no importa lo que cueste—Hablo decidido a los que los otros sonrieron.


—Hablas como todo un novio celoso—Agrego burlón el payaso.


—Por mi está bien siempre que eso lo mantenga a mi lado—Puso una fugas cara gatuna— pueden retirarse y hagan los que les ordene—obedecieron y se fueron de la sala. El albino se levantó y se puso a mirar por una ventana pensativo—(lo que indique servirá para despistarlos un rato, pero ese tal Kaito y el maldito Kuroro tiene experiencia puede que sospechen algo, si Gon se mantuviera aquí se solucionaría el problema pero sería volverlo a encerrar y no quiero eso)—estaba intranquilo ante la amenaza que les rodeaba, normalmente disfrutaba de ese tipo de tensión pero esta vez estaba en juego alguien valioso y realmente importante así que cada movimiento es crucial— (no puedo mantener callados a los testigos durante mucho tiempo pero tampoco quiero mantenerlo encerrado tal vez ¿Y si cambiáramos de ubicación?... si… tenemos muchos escondites en zonas desiertas quizás…)—tan metido estaba en sus pensamientos que no noto una presencia detrás de él, estaba por taparle los ojos pero en eso el albino reacciono y agarro a la persona y la tiro contra el sofá colocándose encima.


—¡Ack! Killua eres muy rudo—Decía adolorido Gon con el nombrado encima de él mirándolo divertido.


—Eso te pasa por intentar asustarme.


—¡Yo solo quería darte una sorpresa!—Puso un puchero molesto.


—Pues me la diste aquí tienes la consecuencia de ello—Acto seguido beso al otro el cual se sorprendió pero le respondió abrazándolo, el albino aprovecho para introducir su lengua haciendo que el menor soltara un gemidito ante eso sintió un placer delicioso y sus manos viajaron a la cintura del moreno. Estuvieron besándose y tocándose un rato hasta que el aire hizo falta.


—Ahh ¿D-De que hablabas con Hisoka y Lyon?—Pregunto sonrojado jadeante, tratando de ignorar la mirada seductora del peli blanco el cual daba a entender que quería más.


—De nada importante realmente—Respondió en un susurro provocativo, no quería decirle la verdad ya que no quería preocuparlo.


—¿De verdad? —Miro dudoso al mayor el cual asintió sonriente y volviéndolo a besar pero esta vez lo detuvo—la verdad Killua quería hablar contigo—hablo con una mirada seria pero con tono de voz intranquilo, eso preocupo al mayor.


—¿Qué sucede?


—Creo… que debo regresar al reino.


—¿Qué?—Eso lo tomo por sorpresa ¿Acaso el príncipe quiere irse? Ese pensamiento hizo que le recorriera un sudor frio y se reincorporo sentándose en el sofá, mirando serio al peli negro—¿Gon quieres irte?


—¡No te equivocas! —Se sentó de inmediato nervioso tratando de excusarse—en verdad quiero quedarme…


—¿Entonces?


—Pero todavía tengo un asunto con mi reino… y mi padre—Explico un poco afligido, Killua frunció el entre cejo al ver la dirección en que iba la conversación.


—¿Te vas a casar con la princesa?—Pronuncio molesto sorprendiendo a Gon.


—¡Por supuesto que no!


—¿A no? ¿Entonces me vas a entregar a los reinos? No me digas que todo esto fue una treta para que yo bajara la guardia, si es así te felicito me engañaste por completo.


—¡Que no idiota! ¡¿Me crees capaz de hacer eso después de todo lo que ha pasado?!—Grito furioso por las preguntas del albino, este ni se inmuto.


—¿Entonces qué harás?—Miraba al menor entre intrigado y enojado, Gon suspiro tratando de calmarse para aclararse mejor.


—Quiero decirle a mi padre lo que realmente quiero, quizás si le explico me escuche y deje de lado ese estúpido compromiso—Dijo al fin ante la mirada desconcertada del otro.


—¡¿ESTÁS LOCO?!


—¿Eh?—Se extrañó ante la cara alarmada del otro.


—¡¿Qué demonios le dirás a tu padre?! “Papi pase la noche con el muchacho que me secuestro así que no lo voy a entregar ni me voy a casar, por favor explícales a los reyes y que no haya guerra” ¡¿ACASO LE VAS A DECIR ESO?!-Grito mirando con cara de espanto a Gon el cual puso una expresión molesta.


—¡Claro que no! ¡Yo nunca le diría papi a Ging!—Reprocho ofendido y al mayor le salió una venita palpitante en la frente.


—¡Maldición ese no es el punto!—Empezó a darle en la frente con el dedo—¡Imbécil harás que me decapiten y que a ti te hiervan en agua bendita!


—¡Auch! ¡Pero no se me ocurre algo mejor! ¡No quiero casarme pero tampoco quiero entregarte! —Decía adolorido y al escucharlo el albino paro su ataque con dedo quedando un momento pensativo—¿Killua?


—Por ahora Gon solo quédate con nosotros.


—¡Pero eso sería-


—No vas a quedar como el príncipe cobarde que se fuga con un ladrón—Hablo adivinando los pensamientos del moreno—pensaremos en algo confía en mí—aclaro sonriéndole haciendo que el menor se tranquilizara.


—Gracias Killua—Abrazo al nombrado el cual lo recibió con una sonrisa pero a sus adentros estaba preocupado.


— (No me esperaba esto, Gon en verdad sigue sus principios)—Pensó mientras abrazaba más fuerte al peli negro y lo volvía a acostar contra el sofá—(¿Que hare? Nunca iré a la cárcel y prefiero matar a la princesa que verte casado con ella)—escondió su cara en el cuello del otro—(ahora debo evadir a la caballería y al Geney Ryodan mientras te persuado para que te quedes, pero si no se me ocurre algo pronto te iras para siempre, tch ¿Por qué lo complicas todo?)—suspiro cansado.


—¿Sucede algo Killua?—Pregunto algo preocupado ante el silencio del otro.


—No… solo pensaba…


—¿Si? ¿En qué?


—Dime… ¿Te gustan los bosques misteriosos y solitarios? (La idea de encerrarte y estés a toda hora a mi merced se ve cada vez más tentadora)—Hablo con dulzura pero con un pensamiento muy posesivo en su cabeza.


—¡Claro! ¿Pensabas en eso? ¡Eres el mejor Killua! Soy tan afortunado de conocerte—Hablaba de una manera tan ingenua y dulce que hizo sonreír al otro.


—Idiota (Sera culpa tuya lo que vaya a pasar o lo que te vaya a hacer Gon).


¡Muy bien! primero tenemos la situación de los reyes que quieren matrimonio forzado o al ladrón en la cárcel, este último no permitirá que el príncipe se vaya por ningún motivo y peleara contra la caballería o contra el Geney Ryodan para quedarse con Gon incluso si hay que mentirle un poco. Al parecer lo que sea que vaya a suceder será la consecuencia buena o mala de la decisión que tome el joven arquero ¿Qué es lo que pasara de ahora en adelante?




Continuará…

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