Capítulo 7: Hasta un monstruo es celoso.

Era temprano por la mañana y Gon se levantaba pesadamente de la cama, bostezo cansado y escucho unos golpecitos en la ventana, sabiendo de que se trataba se giró con una sonrisa.

—Buenos días cachorro ¿Qué tal fue tu cumpleaños?—Pregunto con una sonrisa el minino.

—No me esperaba que Alluka y Kalluto me hicieran un pastel—Comento mientras se dirigía al baño bajo la mirada del gato.

—Ese chico con kimono te ha cogido cariño eh—Añadió curioso a lo que el moreno le respondía desde el baño.


—Me dijo que mi gusto artístico era más refinado que el cualquiera de esta mansión—El gato arqueo la ceja intrigado.


—¿Gusto artístico?


—Yo solo le dije que llevaba un lindo kimono—Dijo antes de empezar a cepillarse los dientes y empezar a arreglarse, después de un rato salió vestido con su característica ropa verde.


—¿Hoy que harás cachorro?


—Unmm… Silva san me hará pruebas de rutina supongo.


—¿Y el chico de blanco?—Su pregunta le saco un suspiro desganado al moreno.


—Hoy Killua tiene actividades en la escuela por lo que no lo veré hasta en la tarde—Respondió un poco triste para luego subirse en la cama y apoyarse en el marco de la ventana—al menos podre saludarlo cuando salga—miro fijamente abajo esperando ver una cabellera blanca.


—Siempre estas atento a él—Mencionó con una sonrisa a lo que el moreno lo miro confundido.


—Bueno si, es mi primer amigo por eso soy atento a él.


—En parte puede ser por eso.


—¿Eh?


—Oye mira, hablando del rey de roma—Apunto al suelo y Gon vio a Killua con su característica ropa de colegio dirigirse al frente del patio de la mansión, el moreno sonrió emocionado.


—¡Allí esta! ¡Killu—Iba a gritarle para llamarlo pero vio como una chica rubia con el mismo uniforme que el albino se acercaba con una sonrisa saludándolo, esto sobresalto un poco a Gon ya que hablaban amigablemente…


—¡Oh es ella otra vez!—La voz del gato lo saco de sus pensamientos.


—¿La conoces?—Pregunto curioso a lo que el minino asentía.


—Ayer, durante el tiempo en que te fuiste, esa chica vino a buscar a Killua creo que se llamaba Retz o algo así, se molestó cuando supo que no estaba—Explico tranquilamente ante lo nervios del moreno.


—¿Y p-para que venía?


—No lo sé, no lo dijo—Se encogió de hombros excusándose y Gon volvió a mirar a Killua, este bostezaba aburrido mientras aquella chica le hablaba sobre algo, al verla mejor era rubia con pelo largo hasta la cintura y llevaba un listón rojo, su uniforme era igual al del albino solo que llevaba falda corta y un bolso azul oscuro.


—Es linda…—Murmuro para sí mismo pero algo le hizo recorrer un sudor frio, esa tal Retz le tomo la mano a Killua y este no se resistió solo puso una expresión aburrida y se dejó arrastrar por la rubia hasta la salida.


—Valla eso no me lo esperaba ¿Sera que esa chica es la hembra de Killua?—Comento normalmente ignorando por completo el colapso mental que pasaba el moreno.


—N-No creo… Killua me lo hubiera dicho.


—Unmm pudo habérselo pasado.


—Alluka me hubiera dicho algo.


—¿Crees que le diría ese tipo de cosas a su hermanita?


—Pu-Pues Illumi estaría en contra.


—¿Romance secreto?


—¡Suficiente!—Grito ya no pudiendo más sorprendiendo al minino.


—¿Eh?


—¡Killua no puede tener novia!


—¿Po-Por qué?


—¡POR QUE NO!—Respondió jadeando exaltado bajo la mirada insistente del minino.


—¿Cachorro?


—¿Qu-Qué?


—¿Estas celoso?—Su pregunta puso más rojo que un tomate al moreno.


—¡¿AH?!


—Es que estas actuando muy raro—Le comento tranquilamente—no te pongas así, Killua debe tener muchos amigos y esa chica debe ser una más del montón—puso una sonrisa pensando que eso tranquilizaría al otro pero este quedo en silencio y pensativo.


—Muchos amigos…


—¿Cachorro?—Iba a decir algo pero la puerta del cuarto se abrió repentinamente dejando ver a Gotoh y sin dudarlo salto por la ventana.


—Gon kun te he traído el desayuno—Hablo de manera tranquila mientras dejaba la comida al lado de la cama, pero noto el silencio del niño y eso lo extraño—¿Gon kun?


—¡Ah! Buenos días Gotoh san—Dijo saliendo de su ensoñación y dirigiéndose rápidamente a comerse su desayuno—¡Gracias por la comida!—al ver al menor comer Gotoh suspiro y se dispuso a salir de la habitación pero la voz del moreno lo detuvo—nee Gotoh san ¿Conoces a Retz?—pregunto nervioso y el adulto lo miro por un momento pensativo.


—Retz es la hija de una familia respetada que tiene lazos con la familia Zoldyck—Explico a lo que el menor escuchaba con atención.


—Y… ¿Cómo se lleva con Killua?—Pregunto un poco nervioso ante la mirada expectante del mayordomo.


—Ellos se conocen desde hace tiempo pero no se ven mucho debido a que tiene deberes que hacer—Gon lo miro un poco más tranquilo.


—Gracias Gotoh san.


—No fue nada—Decía tranquilamente—Silva san tiene unos asuntos que atender así que tienes el día libre pero ten en cuenta que Illumi sama estará cerca—Gon asintió entendiendo y el mayordomo se retiró.


—Creo… que caminare un rato—Se levantó de la cama y se dirigió a la puerta para salir de la habitación. El moreno camino un rato por los corredores hasta que vio una puerta abierta sintió curiosidad así que miro por la ranura y vio a Alluka jugando con unas muñecas, con una sonrisa entro—hola Alluka chan.


—¡Ah! Hola Gon kun—Sonrió tiernamente, su cabello había crecido hasta la cintura y llevaba puesto un vestido rosa y unos zapatos rojos con una cinta en el pelo blanca—¿Qué haces?


—Solo caminaba—Respondió con una sonrisa pero después se puso un poco nervioso—nee Alluka chan.


—¿Si?


—¿Conoces a Retz?—La niña quedo por un momento pensativa.


—¡Ah! Es esa chica rubia que le gusta mi onii chan—Gon quedo en shock ante lo que dijo.


—¿L-Le gusta?


—Sip, la oí decírselo hace mucho pero mi onii chan la rechazo—Dijo tranquilamente ante el alivio de Gon.


—A-Así que la rechazo…


—Aunque creo que ella no se ha rendido—Comento pensativa pero luego miro a Gon que tenía una expresión preocupada.


—¿A-A no?—Balbuceo y la otra sonrió.


—Gon.


—¿Si?


—¿Estas celoso?—Ahora el moreno se sonrojo a mas no poder y miro a otro lado muy nervioso.


—¡N-NO!—Decía en voz muy alta ante las risitas de la niña.


—Pero si te asusta que mi onii chan este con Retz.


—N-No es solo que me da curiosidad.


—¿De que este con mi Onii chan?


—Bu-Bueno sí.


—Una vez lo beso.


—¡¿DE VERAS?!—Grito alarmado y Alluka solo sonreía.


—No, solo quería ver tu cara de susto—Añadió con un tono de voz tierno y Gon puso un puchero mientras daba pisotones fuertes hacia la puerta.


—¡CADA DÍA TE PARECES MÁS A KILLUA!—Grito molesto para luego salir de la habitación y la chica soltó una risita.


—Jeje Gon es lindo y por eso lo quiere mi onii chan—Dijo para sí misma mientras volvía a jugar con sus muñecas.


Nuevamente el moreno caminaba por las habitaciones, esta vez caminaba más deprisa y con un sonrojo en sus mejillas murmurando quejas de que Killua es una mala influencia para Alluka.


—Mooo ¡Solo olvídalo! —Murmuraba para sí mismo mientras trataba de calmarse sin embargo se detuvo de improviso, podía escuchar una melodía de piano con un tono suave—esa música… creo que es Beethoven—empezó a caminar hacia el origen de la melodía hasta llegar al cuarto con el piano, aquel sonido era hermoso pero un tanto oscuro y al oírlo una sensación en su cuerpo le decía que debía alejarse de ese lugar pero su curiosidad era más fuerte así que tomando aire miro en la ranura de la puerta, se sorprendió de sobremanera al ver a Illumi, tocaba las teclas del instrumento de una manera armoniosa y concisa, hasta podía verse elegante pero de repente paro.


—¿Qué haces husmeando?—Hablo hacia la puerta con su usual expresión indiferente y Gon sintiéndose atrapado entro—¿Entonces?—esperaba la respuesta del menor.


—Solo escuche el piano y me entro curiosidad-Decía honestamente—no pensaba que sabias tocar el piano Illumi.


—Quería enseñarle a Killu pero al final cambio de idea como siempre—Añadió con un suspiro—igual solo lo hago para desestresarme—eso aumento la curiosidad del menor, aunque sabía que tenía que irse no podía evitar preguntarle cosas.


—¿Estas… estresado?—Pregunto dudoso ante la fija mirada sin expresión del mayor.


—¿Sabes lo que es vigilar las veinticuatro horas del día a un monstruo disfrazado de renacuajo verde? —Gon frunció el entrecejo—y que de paso también tienes que verlo en compañía de tu preciado hermanito—explico con indiferencia mientras se levantaba del asiento del piano.


—Killua está conmigo porque es mi amigo—Declaro serio con el entrecejo fruncido a lo que el mayor ladeo la cabeza mirándolo.


—¿Con que tu amigo?


—¡Sí!


—¿A un amigo se le vigila celosamente desde la ventana de tu habitación?—Su pregunta hizo ruborizar a Gon.


—¡No estoy celoso! Es solo que me dio curiosidad…


—Con que es así… oh bueno eso no me importa—Comento tranquilamente mientras empezaba a caminar en dirección a la puerta—la verdad no entiendo por qué Killu está encaprichado contigo siempre puede conseguirse alguien mejor y que además…—le paso por un lado al menor el cual estaba callado perdido en sus pensamientos—sea un ser humano normal—acto seguido se retiró de la habitación dejando solo al moreno, este puso una expresión triste mientras se sentaba en un sofá que había allí.


— (Mushu: Killua debe tener muchos amigos y esa chica debe ser una más del montón…) es cierto… ella debe ser una más del montón pero…—Murmuro con la mirada cristalina—si es así… ¿Yo que soy?... —se dejó caer acostándose en el mueble—yo… no tengo nada más que a Killua y por eso es tan importante para mi… pero eso no significa que yo sea igual de importante para el… —un montón de pensamientos le recorrían la cabeza y suspiro cansado—es triste estar solo…


—Pues ya no lo estás—La salvaje aparición del albino sobresalto al moreno, este por reacción se levantó.


—¡Killua no te me aparezcas así de repente!—Regaño agitado, respirando con dificultada por el susto y poniendo un mohín por la sonrisa burlona del albino.


—Pero es que me encanta hacerlo—Puso una mirada gatuna ante los refunfuños del otro pero después repentinamente cambio a una expresión seria que sorprendió al peli negro—dímelo Gon—pronuncio cortante y el nombrado lo miro confundido.


—¿Eh? ¿Decirte que?—El albino se acercó a él hasta estar cara a cara, lentamente alzo su mano hasta la cara del moreno y toco su mejilla acariciándola, Gon se ruborizo un poco pero no se resistió y solo miro los profundos ojos azules en frente suyo.


—¿Qué te preocupa tanto?—Hablo de manera suave y el otro se puso nervioso.


—Na-Nada realmente—Su corazón palpito rápido al sentir esa mirada profunda encima suyo por lo que no pudo evitar desviar sus ojos a otro punto en la habitación.


—¿De veras?—Ahora deslizo su mano por la mejilla del otro hasta llegar a su hombro notando los ligeros temblores que producía su tacto en él, ahora ya con el nervio en la garganta Gon tomo suavemente la mano de Killua y sonrió nerviosamente.


—¡De veras Killua estoy bien!—Declaro tratando de sonar lo más normal posible y el albino suspiro.


—Gon—De repente tomo el cuello de la chaqueta de Gon y lo jalo hacia el hasta tener sus rostros muy cerca—cuando le mientes a alguien debes mirarle a los ojos para que sea más creíble lo que dices—susurro contra los labios del peli negro haciéndolo ruborizar al tener la cara del albino tan cerca.


—Ki-Killua n-no hagas eso…—Murmuro pero el nombrado se hizo el desentendido.


—¿Qué cosa?—Al hablar rozo sus labios nuevamente para ver la cara nerviosa de su “Amigo”.


—¡Eso! —Con sus manos tomo los hombros del albino con la intención de separarse pero por alguna razón sus fuerzas lo traicionaron, notando eso y como castigo Killua volvió a rozar sus labios—¡Va-Vale Killua! ¡Te lo diré así que suéltame!—agito los brazos nerviosamente ya rindiéndose y ante eso el albino sonrió divertido soltándolo suavemente.


—Me encanta que seas tan dócil—Dijo malvadamente ante la expresión sonrojada y nerviosa del moreno.


—Eres malo…—Pronuncio con un puchero.


—Entonces dime ¿Qué te sucede?—Volvió a retomar su pregunta cruzando sus brazos esperando una respuesta, Gon suspiro para agarrar fuerzas.


—Killua debes de… conocer muchas cosas buenas ¿No?


—¿Ah? —Pronuncio intrigado ante la extraña pregunta—¿A qué viene eso?—Gon trago grueso.


—Es que cuando lo pienso… debes conocer tantas cosas y en cambio yo solo te conozco a ti y siento… que me quedo atrás—Al ver la mirada interrogativa que le daba el peli blanco supo que debía ser más específico—bu-bueno es que… por ejemplo cuando te vi con aquella chica Retz esta maña—unas salvajes carcajadas lo interrumpieron por completo, Killua reía descontroladamente sosteniéndose la barriga.


—¡¿Era eso?! AJAJAJA ¡¿Estas celoso?!—Nuevamente la cara del moreno se volvió más roja que un tomate.


—¡No lo estoy! Agh ¡¿Por qué todos dicen eso?!—Se quejó viendo y escuchando a toda voz las risas.


—O-Ok ha-hay que aclarar esto—Pronuncio tratando con esfuerzo no volver a romper a reír y mirando la cara molesta y sonrojada de Gon—en primer lugar Gon, Retz es la presidenta estudiantil de mi escuela por lo que mis tratos con ella son solo profesional—declaró con una sonrisa y el peli negro puso una mirada confundida.


—¿Profesional?


—Veras su familia es dueña de la escuela y digamos que “exactamente” no soy un ejemplo de estudiante por lo que me tiene constantemente vigilado, hoy por ejemplo soy sospechoso de unos laxantes en la comida de la cafetería y tuvo que llevarme tomado de la mano hasta la oficina del director, que molestia…—Lo último lo murmuro de mala gana, el moreno quedo por un momento pensativo.


—Y-Ya veo, una más del montón…—Susurro pero Killua lo escucho perfectamente.


—¿Cuál montón?—Interrogo a lo que el aludido se sorprendió.


—Bu-Bueno del montón de personas que trata con Killua—Balbuceo nervioso a lo que el albino suspiro cansado.


—Mira Gon yo no trato a demasiada gente—Dijo con el entrecejo fruncido—yo odio a todos mis compañeros y profesores de la escuela por igual, solo tú y Alluka creen que podría hacerme amigo de alguno de esos imbéciles—decía esto entre dientes ante la mirada sorprendida del otro, pero después se paralizo cuando de repente Gon lo abrazo enrollando sus bracitos en su cuello.


—Debes estar muy solo…—Le susurro con voz tierna en la oreja al otro mientras este abrazaba su cintura.


—Te tengo a ti ¿No?—Esbozo una sonrisa—así que no andes pensando que te estaré dejando atrás por los demás—Gon se sorprendió al darse cuenta que el albino adivino sus pensamientos, con una sonrisa se separó del otro.


—Gracias Killua, estoy feliz de haberte conocido—Ahora fue el albino quien se ruborizo salvajemente.


—I-Idiota no digas cosas vergonzosas y vámonos que no quiero estar encerrado aquí—Se fue a la puerta dando nerviosos pisotones fuertes bajo la mirada confundida de Gon.


— (¿Vergonzosas? Pero hace un momento tus labios y los míos…)—Su corazón volvió a latir y se sonrojo.


—¡Gon date prisa!


—¡Ah! ¡Voy!—Y el moreno se fue corriendo sin entender bien que era eso que hacia latir su corazón…


Continuará….